Listaa

martes, 30 de diciembre de 2014

Página 165.

—No te puedes imaginar lo que ha pasado…—me cortó.
—¿Tú te crees que soy gilipollas?
—¿Qué?
—Que te he visto chica, te he visto besándole.
Dios mío…era lo que me faltaba—Te va a parecer una gilipollez pero creía que eras tú…
—Mira Nina se acabó.
—Pero... Edgar…—Se marchó antes de que pudiese terminar la frase. Literalmente, me temblaban las piernas. Diego se acercó a mí.
—Lo he visto todo…
—No comentes…—Me estaba entrando dolor de cabeza y tenía un frío tremendo.
—Puedo proponerte algo bastante estúpido.
—Di.
—Vayamos al acantilado.
Miré hacía un lado y Edgar ya andaba bailando y tocándole el culo a otra. Creo que era mejor que quedarme ahí, porque al final me quedaría temblando y llorando, llorando no sé si de pena, o de rabia, por todo, absolutamente todo lo que había ocurrido aquella noche. Me dirigí a salir de la aglomeración y él me siguió, ir al acantilado, viendo que era tan de noche no entraba en la cabeza de nadie, pero tampoco necesitaba que nadie comprendiese lo que hacía o no.
Subimos en silencio y llegamos al borde, desde allí se veía toda la fiesta aunque estuviese bastante lejos.
—¿Quieres hablar? — Me propuso.

—Puede ser…

No hay comentarios:

Publicar un comentario