A decir verdad descubrí muchas cosas por mí
misma ese viaje, cómo saber si alguien miente tomando su pulso, quieras o no se
acelera un poquito más aún que seas la persona más convincente al hablar. Me
repetí que ya le había dejado atrás, y hubo indicios claros de que estaba
mintiendo. Aprendí cosas, como que el corazón roto es fuerte, porque aunque yo
crea que está tumbado en una mini camita, que seguramente habría formado mi
organismo, en una habitación encerrado, tumbado y rindiéndose a vivir con un montón
de celo intentando juntarse, comprendí, que, el corazón tenía más funciones que
la que es estar enamorado, comprendí que es fuerte porque él bombea la sangre
cuando estoy puesta en pie para que llegue desde el dedito pequeño de mi pie
hasta mi cabeza, interponiéndose a la gravedad y haciendo que litros y litros
de sangre circulen. Mi corazón era conductor, era enamoradizo, era guardia de
tráfico, era un tambor, era débil y fuerte a la vez... pero lo que no sabía que
era, es...que era totalmente suyo. Como si hubiesen escrito el nombre de mi
enamorado con la punta de un compás por cada parte de mi pequeño órgano. Como
si él bombease con su nombre, como si de verdad no hiciese "pum,
pum...pum, pum" Como si de verdad susurrase su nombre "Edgar,
Edgar...Edgar, Edgar" ¿Loco enamorado él, ah? Que dedica su vida entera,
cuando trabaja y cuando descansa a susurrar su nombre, ¿Y por qué le elegiste a
él corazón?, ¿Y por qué no a otro? Si no tienes ojos, no tienes oídos, no
tienes tacto, si quiera olfato... ¿Cómo puedes elegir a alguien cuando no
tienes sentido alguno? Creo que esta respuesta la brindó mi cerebro: "Ya,
deja de hablar con algo que tampoco tiene boca, estúpida, él lo eligió a él
porque de algo tenía que enfermar y morir, él lo eligió a él porque le encanta
bailar y la persona que más música, mariposas y eufórica te ponía fue la
elegida, tú lo elegiste idiota, el corazón sólo quería pasárselo bien y acabó
roto"
-¿En qué piensas?- me sacó del trance mi
hermano. Negué para ordenar mis ideas un segundo y le miré.
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