Ercole
trabaja en muchas cosas y eso le quitaba mucho tiempo, era el jefe de una
fábrica en la que hacían puertas de hierro forjado, eso desembocaba en levantar
mucho peso, cuando podía era dependiente en una marca conocida de ropa en el
centro comercial, también transportaba productos textiles y comida en grandes
camiones de un lugar a otro, tenía el título de socorrista y en verano pasaba
las tardes en la piscina de al lado, según me había contado hace un mes también
pintaba y reponía vallas en los colegios o lugares públicos, si trabaja en todo
eso era porque era muy serio en cuanto a ellos y tenía una buena base. Siempre
andaba ocupado, no pudo terminar los estudios por falta de dinero, y con eso,
no pudo entrar en la universidad, pero era inteligente, muchísimo. Siempre que
podía enviaba algo de dinero a casa, como yo ahora que trabajaba.
Entendía
que nunca tuviese demasiado tiempo, pero ahora estaba relajado y de vacaciones.
Cuando pasé
la quinta cerveza y le contaba cosas a sus compañeros de piso que, en otra
situación no habría contado a nadie que conociese de unas horas mi hermano me
cogió y me llevó a la cama .
—Suficiente por hoy — le oí
murmurar.
Abrió la
cama y yo me agarré al oso de peluche, iba algo borracha. Él se tumbó al lado
de mí. La ventana era vieja pero me sorprendió lo bien que aislaba el calor, se
oían disparos provenientes de la TV, habían empezado otra partida sin mí, me
ofendí.
— ¿Cuánto te pagan por trabajar?— rompió el
silencio.
—Siete euros la hora — sonreí — Aunque
luego siempre me dan algo de propina — recalqué
orgullosa.
—¿Y qué haces?
—La mayor parte del tiempo limpiar, pero también
atiendo — escuché su risa — Es para
que Rebecca y Cleo tengan una buena navidad, ¿vendrás a cenar a casa en
nochevieja?
—Claro — dijo en tono
confiado — Lo prometo. —Sonreí y le
abracé — He pensado que podríamos mañana comer con
Ulisse, ¿está eso bien?
—Sí —respondí.
—Podemos ir a un restaurante y todo eso — su voz
sonaba cada vez más débil y antes de que me diese cuenta su respiración era
regular y calmada.
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